viernes, 7 de mayo de 2010

ANÁLISIS DE LOS ACTORES DEL CONFLICTO. REPORTE DE CAMPO.


Son múltiples los asuntos de menores infractores, sin embargo, a continuación se expondrá el caso de dos hermanos, CARLOS y ALBERTO, dos niños de 4 y 2 años, quienes fueron reportados por omisión de cuidados y por delinquir.

Problemática

Mediante reporte realizado ante el Departamento Jurídico del DIF Torreón, se solicitó la intervención de la Procuraduría de la Familia, en el caso de los menores CARLOS Y JESUS MARTINEZ TORRES, de 4 y 2 años de edad respectivamente, señalando que dichos menores son víctimas de síndrome de maltrato y omisión de cuidados por parte de su abuela, la Señora Margara Martínez Torres y de su madre, la señora Rocío Martínez Torres. Asimismo, los menores desempeñan actos delictivos, por tanto, se solicita la colaboración de la Procuraduría a fin de que se disponga la separación provisional y preventiva del seno familiar de los menores antes mencionados por encontrarse en situación extraordinaria, así como la asistencia social y la rehabilitación respectiva por su comportamiento criminal.

Investigación

Posterior al reporte, se realizó una visita social al domicilio de los menores, recopilándose información por parte de los vecinos, los cuales fueron entrevistados:

TESTIGO 1. Anteriormente en el domicilio vivían también unos tíos de los niños, los cuales eran drogadictos pero actualmente se encuentran encarcelados. En cuanto a la madre de los menores, la señora Rocío, hace un tiempo asaltó una farmacia junto con su novio, sin embargo, su mamá hizo todo lo posible para que su hija no fuera llevada a la cárcel. Asimismo, asiste a un grupo de Alcohólicos Anónimos porque antes tomaba mucho.

TESTIGO 2. Los niños piden comida a los vecinos, además no asisten a la escuela y siempre andan en la calle haciendo maldades, la casa esta sucia y la abuela no les pone atención. En una ocasión me asaltaron, cuando venía del supermercado y me quitaron las bolsas del mandado y el niño menor, sacó una pistola de juguete y me apuntó diciendo que si no le daba todo lo que traía me iba a dar un pistolazo. En ese momento no me percate que era de mentira, además de que la mirada y actitud de los menores eran demasiado amenazantes.

En el mismo reporte realizado por la Trabajadora social, menciona que el domicilio se encontraba física e higiénicamente muy descuidado, siendo no apto para la estancia de los menores.

Inmediatamente se procedió a una separación provisional de los menores CARLOS Y JESUS de apellidos MARTINEZ TORRES de 4 y 2 años de edad, por encontrarse en Situación Extraordinaria, ordenándose el ingreso del menor JESUS de 2 años de edad, a una Casa Cuna, y del menor CARLOS de 4 años, a la Casa Hogar del D.I.F., con la finalidad de salvaguardar su integridad física, moral y emocional, atento a que los menores se encontraban en Situación Extraordinaria, hasta en tanto se resolviera su situación legal definitiva.

Tanto los menores como la abuela y la madre son requeridos para acudir a la Procuraduría a efecto de declarar:

CARLOS. Señala que vive con su mamá ROCÍO y que tiene un hermano que se llama JESÚS, que su abuela es quien esta en la casa siempre porque su mamá trabaja ayudándole a un señor a vender gorditas todas las mañanas y que va a un grupo AA porque antes tomaba mucho. Dice que sí hace travesuras en su casa pero que afuera no, que al lado de su casa viven TOMAS Y ANDRES, dos hermanos de 11 y 6 años y se juntan mucho con ellos y que por eso les echan la culpa de todo, pero en verdad ellos son los que rayan los carros y camionetas, se pelean y dicen groserías y cuando las niñas salen de la escuela le suben la falda y les dan besos. Comenta que su mamá tiene un novio que esta en la cárcel y que cada semana va a verlo; que tanto él como su hermano no están en la escuela porque su mamá los sacó porque los iba a meter a otra pero que siempre no lo hizo ya que no tenía dinero para mandarlos.

JESUS. Señala que su mamá es ROCIO y que vive con su hermano CARLOS y su abuela MARGARA, que siempre anda en la calle con su hermano y que en una ocasión saco una pistola para quitarle a una vecina las bolsas del mandado, pero que la pistola no tenia balas.

MARGARA. Señala que es abuela de CARLOS Y JESUS, que son hijos de su hija ROCIO. Manifiesta que no es cierto que los niños sean descuidados y tampoco maltratados, pero que hay gente que les molesta que anden en la calle y que les peguen con la pelota a sus carros, que de hecho hay vecinas que los mandan a encargos sin pagarles. Dice que su hija tiene un novio en la cárcel y que cada semana le lleva dinero, que su hija era alcohólica y que asiste a un grupo AA pero que últimamente ya no acude, que tienen muchos adeudos de luz y agua, además de que muchas veces no le alcanza para comer porque su hija le deja 10 o 20 pesos al día.

ROCIO. Señala que es madre de CARLOS Y JESUS, que tiene 25 años de edad, que sus hijos no tienen papá, que todos viven con su mamá, la señora MARGARA, que ella trabaja por las mañanas en un puesto de gorditas y mantiene a sus hijos y madre. Comenta que tiene un novio en la cárcel pero que lo metieron injustamente porque no hizo nada, sólo estaba comprando un cigarro cuando llegó la policía y lo subieron. Dice que antes tomaba mucho y que por eso va a un AA, que no es cierto que descuide a sus hijos y que los vecinos solo hablan por hablar.

Luego, la familia fue canalizada a valoración psicológica, a efecto de determinar si ésta es apta emocional y económicamente para ejercer la guarda y custodia de los menores CARLOS Y JESUS MARTINEZ TORRES.

Después de realizar la orientación sistemática, la evaluación psicológica y la investigación social, la terapeuta familiar concluyó que ROCIO Y MARGARA MARTINEZ TORRES, madre y abuela de los menores, respectivamente, no se encuentran aptas para hacerse cargo de la guarda y custodia de sus menores hijos y nietos respectivamente. Canalizando a la madre a acudir al Centro de Integración Juvenil para recibir tratamiento contra las adicciones, y a ambas a la escuela de padres a efecto de recibir terapia psicológica por separado dentro del Centro de Atención e Integración Familiar de Torreón.

A la fecha, los menores siguen internos, puesto que su situación legal no ha sido determinada, la mamá y la abuela, acuden periódicamente a visitarlos, sin embargo, incumplen con las terapias programadas por el Centro de Atención e Integración Familiar, asimismo, el domicilio sigue constituyéndole sucio y no apto para la estancia de los menores.

Según informes de la psicóloga de la Casa Hogar donde se encuentra CARLOS, menciona que el menor muestra cambios positivos, le gusta participar, su actitud es responsable y muestra interés en el estudio.

En cuanto a JESUS, el psicólogo de la Casa Cuna comenta que un principio el menor presentaba signos de depresión y aislamiento por extrañar a su hermano, sin embargo, poco a poco se ha ido integrando a la dinámica de convivencia con los demás infantes.

No obstante, todas aquellas personas que fueron afectadas por los menores quedan fueran de todo el procedimiento, a ellos no se les considera a efecto de recibir apoyo o ayuda psicológica por el daño que recibieron y menos, para sugerir mecanismos o modos de repararlo. Por tanto, los menores tampoco toman conciencia del daño que ocasionaron con sus “travesuras”.

1 comentario:

  1. Han hecho un buen registro de la información recogida en el trabajo de campo. Me preocupa que presenten los nombres completos de las personas involucradas en el caso, pues es importante guardar la identidad de estos. Deben cambiar los nombres y especificar que no son los nombres reales.

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